En los últimos tres o cuatro años he comprado repetidamente en diferentes pedidos una bolsita de chenille rojo para una mosca para carpas que quería montar.
El caso es que siempre que me decido a hacer algunas moscas para carpa no aparece por ningún lado ninguna de esas bolsas, que estoy seguro que no son menos de cuatro.
Porque claro, alguna vez me ha llegado a entrar la duda: ¿Lo habré pedido o no?
Así que voy a revisar el histórico de pedidos en las dos o tres páginas que suelo comprar, y ahí está el dichoso chenille formando parte de alguno de los pedidos.
Pues no hay manera, oye. Cuando lo necesito nunca aparece.
Y eso en mi caso, que siempre tengo la mesa ordenada y los materiales más o menos clasificados. Lo malo que como solo uso chenille en color rojo, no tengo ningún cajón ni ninguna bolsa ni nada específico para tener los chenilles organizados.
Hace unos días ponía en Facebook una publicación con una foto a propósito de tener la mesa ordenada, y los comentarios fueron en la línea que esperaba. No es lo más habitual entre los montadores de moscas tener la mesa despejada y en orden.
Yo no te voy a decir cómo tienes que poner orden en tu mesa. No soy Marie Kondo.
Antes tenía todo revuelto como todo el mundo, pero pasó una cosa que me llevó a cambiar el sistema. Algo parecido a lo del chenille, pero peor.
Todos los años un amigo me pide que le haga unas moscas con un dubbing de antron de Wapsi con un color que yo no uso para mi, así que el primer año que me pidió esa mosca, compré el dubbing en cuestión y después de hacerlas lo guardé en algún lado.
Al año siguiente, cuando me volvió a encargar las moscas y de nuevo iba ese modelo en la lista, no aparecía el dubbing por ninguna parte.
Volví a comprar otra bolsita.
Y así varios años.
Hasta que un día vi que tenía seis bolsitas de ese dubbing que yo no utilizo.
Ahí decidí que tenía que poner orden.
No por una cuestión de orden en sí misma, ni de limpieza ni de nada de eso, sino también por una mera cuestión económica.
Y como te he contado con el ejemplo del chenille, incluso teniendo todo ordenado, siempre hay algún material con gusto por pasar desapercibido que nunca aparece cuando se le necesita.
Así que no. No te voy a decir cómo poner orden en tus materiales de montaje o tu mesa, pero sí voy a decirte las pautas que yo intento seguir por si alguna te parece útil.
1) Hacer listas de la compra antes de hacer pedidos. Cada vez que veo que un material se me está acabando lo apunto en una libreta, hasta que tengo una lista de diez o veinte cosas que necesito reponer, y ahí busco la tienda en la que pueda pedir el mayor número de esas cosas y hago un pedido único, para no coger cuatro cosas en cada sitio y pagar gastos de envío por todos los pedidos.
2) Siempre que sea posible, evito comprar presencialmente los materiales de montaje. Con dos excepciones: la pluma de León y los cuellos y saddles de gallo Whiting, Metz y demás. Aun así ni siquiera esto lo compro presencialmente, puesto que la pluma de León siempre se la compro al mismo criador y ya sabe lo que me gusta y con los cuellos y saddles de Whiting o Metz ya hace tantos años que dejé de ver cosas interesantes en tiendas que ni me molesto en probar a ver si encuentro algo interesante. Ir a una tienda acaba teniendo como consecuencia que nos entren por los ojos y se nos antojen un montón de materiales que después vamos a utilizar poco o nada. Y que acabarán por ahí perdidos en cualquier lado.
3) En mi opinión lo mejor es comprar en cualquier bazar unos cuantos tuppers de almacenamiento de esos que cierran herméticamente y varias bolsas de antipolilla. Organizar los materiales por tipo dentro de cada tupper. Por ejemplo, en mi tupper del dubbing tengo bolsas zip de plástico de tamaño mediano en las que meto los dubbings por tipo: en una bolsa zip todas las bolsitas de antron, en otra el spectra, en otra el ice dubbing, en otra el Fly-Rite, en otra el de liebre, en otra el de ardilla, en otra el de kapok, etc. Y todas esas bolsas zip funcionan como organizadores internos dentro de cada tupper.
4) Hay alguna excepción al punto anterior. Por ejemplo, tengo un tupper con los materiales para moscas de salmón en el que están los cuellos de gallo, el gallo de la jungla, dubbings específicos, todos los pelos de todo tipo de zorro que hay en el planeta, anzuelos, tubos... Otro tupper con los materiales para moscas de mar. Otro tupper con todos los materiales para moscas de lago. O sea, o bien tuppers por tipo de material: dubbing, cdc, pelos, plumas, láminas... O bien tuppers por tipo de montaje: moscas de salmón, moscas de mar, moscas de lago, moscas de carpa/barbo...
5) Aparte de los tuppers, para los materiales y herramientas de uso más habitual, varias cajoneras de esas de madera con cajones pequeñitos que son ideales para tener organizados los anzuelos, los hilos de montaje, los hilos metálicos, los tinseles, los portabobinas, los anudadores, los barnices... Todo lo que hace falta que esté más a mano.
6) Las sedas, rayones e hilos de brinca van aparte de todo esto. Las bobinas pequeñas de diez metros de Gütermann, Amman, La Paleta y demás están en cajas de compartimentos de esas de madera con tapa de cristal transparente que tienen en los bazares. Y los conos de brinca, los conos de La Paleta o las bobinas gordas de Gütermann de 200, 700 o 1000 metros están en bolsas zip de tamaño grande dentro de su propia cajonera.
Y lo más importante de todo: conseguir mentalizarse para que solo salga a encima de la mesa el material necesario para la mosca que vamos a hacer en ese momento, y da igual que hagamos cuatro moscas iguales, seis, doce o cincuenta. Cuando se acabe con ese modelo de mosca, se guarda lo que se ha sacado y se saca lo de la siguiente.
A lo mejor tú no vas a hacer veinte moscas de un mismo modelo, pero a lo mejor sí que haces cincuenta efémeras en cdc que son modelos diferentes pero el patrón es el mismo para todas. Pues entonces sacas el hilo de montaje, el cdc que uses para las alas, el anudador y todo lo que sea igual para todos esos modelos, y solo vas sacando y guardando la seda, el dubbing o lo que sea que va variando para cada modelo.
Otro ejemplo: si llevas en tu caja cinco o seis modelos de tricópteros en paracaídas, pues sacas los anzuelos, el cuello de gallo que vayas a usar para los hackles, el material que utilices para el poste y todo lo que vaya a ser igual en todos los modelos, y así solo tienes que ir sacando el material del cuerpo o de las alas que será lo que vaya variando.
Claro que para poder tener cierto orden en los materiales y la mesa de montaje, lo primero es tener cierto orden en tus cajas de moscas. Si lo que te gusta es copiar todas las moscas que te gusten cuando las ves por internet y llevas en la caja cien moscas diferentes y cuatro o cinco de cada, va a ser casi imposible que tengas orden en la mesa de montaje, ya que vas a necesitar tantos materiales diferentes que estar sacando y guardando cada cinco moscas que hagas no hay hijo de vecino que sea capaz de hacerlo.
Si en tus cajas de moscas hay diez o doce modelos, en varios tamaños cada modelo, y una o dos docenas de cada, tendrás mucho más fácil tener ordenados tus materiales y tu mesa de montaje.
Y, de paso, malgastarás mucho menos dinero en materiales de montaje que ya sabes dónde van a terminar: junto al chenille rojo.